SÍ, NOS GUSTA Y VEMOS LA TELEBASURA. ¿QUÉ PASA?

Se acaban de cumplir  75 años del desarrollo e invención del primer dispositivo capaz de mostrar imágenes en movimiento y explorarlas. Fue el magnífico día 7 de septiembre de 1.927 cuando el ingeniero de radio estadounidense Philo Taylor Farnsworth inventó el tubo disector de imágenes, un importante invento al que podemos culpar del desarrollo de la televisión.

 

Desde ese momento han pasado muchísimos años y muchísimas cosas en torno a ese aparato al que llamaron televisión. En un principio supongo que se utilizaría para dar noticias, para ver películas..... ¿pero crees que en esos años se habrían imaginado un reality show?

 

Hasta hace muy poco tiempo no podíamos imaginar que un programa de la televisión fuera un grupo de personas conviviendo en una casa, encerrados sin comunicación exterior y con muchas cámaras grabando. Ahora eso es una realidad y apoyada por un gran público.

 

Estamos llegando a un punto que echamos mucha culpa a la televisión por emitir lo que se denomina “telebasura”, pero debemos mirarnos a nosotros mismo antes de echar la culpa a los demás.

 Si realmente hiciésemos lo que decimos, y no viésemos la “telebasura”, no tendría razón de ser, los programas se mantienen en la parrilla gracias al público, es decir, gracias a nosotros mismos.  

Asociaciones denuncian que la programación de la tarde esté repleta de esos programas de cotilleo y  de reality show, pero realmente eso es lo que la gente quiere ver. Aunque nos fastidie reconocerlo y manifestemos que no nos importa en absoluto la vida de Rocio Jurado o de Isabel Pantoja, sabemos quienes son y los cotilleos muchas veces nos pueden.

 Se comenta que a las tardes debe haber otro tipo de programación en la que los niños puedan verla sin necesidad de tener que ver la telebasura. Pero ahora digo yo, y si a mi me interesan esos programas y me gustan verlos, ¿Por qué no estoy en mi derecho de poder gozar de ellos?. Si lo que queremos es que los niños no vean este tipo de programas sólo debemos cambiar el canal y poner una cadena en la que estén echando dibujos animados, pero para ello se debe estar atento de lo que ve el niño y no dejarlo solo ante esa “caja tonta”.  Al fin y al cabo estamos en una sociedad donde el cotilleo y los rumores están presentes en cada rincón que pisamos y en que cada esquina que cruzamos, por ello la televisión oferta lo que nosotros demandamos. ¿Por qué el programa Gran Hermano no lo quitan de la televisión? La respuesta es muy fácil, porque la gente lo ve y tiene mucha audiencia. Que creéis que realmente importa, ¿qué sea educativo y que nos enseñe cosas o que tenga audiencia? Si pensamos fríamente que es el programa Gran Hermano llegamos a la conclusión de que son unas cámaras que graban a una serie de persona conviviendo dentro de una casa. Como el programa este se pueden ver otros como “La Granja” o “La casa de tu vida”. Este tipo de programas intentan hacer un  “reflejo” de nuestra vida, y llega hasta tal punto el interés por la vida de los demás, que es un programa con una audiencia muy alta. Que a ciertas personas les molesten o no les gusten no es una razón para destruirlos o quitarlos, ya que para gustos están hechos los colores. Puede que a mi me interese más un programa de cotilleo y a ti uno de documentales, cada uno va a ver lo que realmente le gusta.  Otra cosa que debemos tener en cuenta es la cantidad de programas basura que se encuentran en al parrilla. Cuando en una cadena empieza un programa de esos, las demás cadenas intentan hacer lo mismo, porque estos conllevan mucha audiencia. Si dejásemos de ver esas cosas, desaparecerían de la televisión.  Tengamos más cuidado con lo que decimos y nos paremos mas a pensar lo que vemos porque, al fin y al cabo, la televisión oferta lo que nosotros demandamos.